Municipio de la provincia de Huelva situado a tan sólo 20 km de la capital, con una población aproximada de 15000 habitantes.
Con esta entrada relataremos nuestra experiencia en la visita a este municipio para las vacaciones de verano en pleno mes de agosto.
Para empezar diremos que la duración de la estancia fue de una semana completa, de lunes a lunes. Nos alojamos en un apartamento en el centro del municipio por un precio de 700 euros la semana y con capacidad máxima de 6 personas. El apartamento salió bastante bien de precio si tenemos en cuenta el precio medio de la zona; se encontraba en la calle Caracola a tan sólo 100 metros de la calle Ancha, referencia nocturna del municipio.
Pues bien, para dejar las cosas claras desde el principio diremos que este municipio nos decepcionó bastante, ya que no se ajustó a las expectativas, ni en el sentido de fiesta ni en el de playa; a pesar de ello, intentaremos dar una imagen clara de lo que este lugar ofrece.
Nada más llegar, el tema del coche se presenta como un gran problema, ya que no hay donde aparcarlo, todo el pueblo está tomado por estacionamientos limitados horariamente y la variedad de colores pintados en las calles hará que te vuelvas loco: azul, verde, rojo, naranja y apenas nada de blanco. En los azules hay que pagar todos los días de 9 de la mañana a 12 de la noche y el tiempo máximo es de 2 horas así que olvídate del azul y busca otro color. Los naranjas son para residentes así que no podrás utilizarlos. Los rojos solo se encuentran en zonas determinadas y son los más aconsejables ya que pagas tan solo 6 euros para toda una semana, el problema está en encontrar un sitio apto, ya que todo el mundo te dirá que aparques en la zona del cuartel de la Guardia Civil; nosotros no lo aconsejamos por ser una zona muy amplia y fuera de tránsito, lo cual puede hacer fácil la tarea de los robos, aunque bien es cierto que el municipio parece seguro y escasea la delincuencia, si bien esto es lo que parece sin poder asegurarlo. Las zonas verdes no recuerdo para que eran. Cuidado con equivocar zona roja con naranja!
Tan sólo hay un parking de pago y sale por 17 euros al día así que barato no es, suele haber disponibilidad, pero no te descuides en intentarlo el fin de semana o estará completo.
Una vez solucionado el tema del coche, echamos un vistazo al pueblo en sí, casas bajas y calles estrechas conforman el centro del mismo, la limpieza deja que desear y algunos olores raros acompañan la panorámica.
Aquí todo nos conduce a la calle Ancha y al paseo por la ría, así que hablaremos de ello.
No existe paseo marítimo y en su lugar hay un paseo que discurre a lo largo de la ría que baja de Huelva, pequeñas barcas complementan el paisaje, pasear para contemplarlo puede merecer la pena.
La calle Ancha es aquella donde se encuentra la oferta de ocio, tanto bares, restaurantes, heladerías, etc.. como los pubs y demás locales por donde tendrás que salir si quieres algo de marcha. Se hace extraño ver la mezcla de gente de gente joven tomando sus copas con la gente mayor paseando con niños y abuelos.
Pues bien cabe decir que la calidad de la comida en general está bien, nosotros salimos todos los días a cenar fuera y fue bastante bien; recomendar el Varadero y la Brasería. Cuidado porque Varaderos hay dos en esta calle y para cenar mejor el que está más próximo a la Brasería, una vez probados ambos hay bastante diferencia en calidad y trato. Si vas a la Brasería pide el pez espada al jerez con papas al horno y saldrás satisfecho. El Varadero más para raciones, son grandes, buenas y económicas. Prueba las coquinas, las mejores las comimos en el bar Juanito el Coronel, aunque el resto de raciones no estuvieron mal al final nos pegaron un poco el estacazo. Desaconsejamos el bar Marinero, muy buena pinta por fuera, precio más caro y prometía, pero la realidad fue decepcionante totalmente, más caro y te quedas con hambre, así que pese a que nos lo habían recomendado no nos gustó en absoluto. El bar los Caracoles es muy de batalla, aquí come la gente del pueblo, nos pareció un rancho y la calidad muy justa por no decir mala, además es autoservicio como otros muchos aquí y tendrás que esperar tres colas para comprar tu comida y luego sentarte en tu mesa a comertela.
Una vez llenada la barriga, toca salir a tomar unas cerves así que como todo está en esta calle pues queda cerquita. Lo que encontrarás serán unos 7 u 8 pubs donde la gente se sienta en las mesas de la terraza a pie de calle y se toma tranquilamente su consumición. La sensación es de muy poca fiesta entre semana ya que aparentemente toda la gente que encuentras es del pueblo y hay muy poca gente de fuera que quiera salir a tope. Todo el mundo te dirá que esperes al fin de semana que se pone todo hasta arriba, pero llegado el momento de nuevo decepción, gente afuera, garitos a medio llenar y gente de la zona con pocas ganas de relacionarse con los extranjeros. En nuestra andanza frecuentamos 3 pubs, el Varadero, el Faro y el Desván del abuelo; pues bien, la gente más joven acude al Varadero que al final resultó ser el mejor; la gente un poco más mayor al Abuelo y en el Faro un poco de todo, éste último es el más grande y al parecer el único que funciona en invierno. Los jueves suele haber conciertillos en la mayoría de ellos asi que puede estar bien.
Estos pubs abren hasta las 4 de la madrugada y después deberás irte al Consorcio o a la Suite. El Consorcio es una discoteca al aire libre que solo funciona en verano, el pase cuesta 10 euros con consumición; en general está bien, pero tampoco nada del otro mundo, acercarse una noche merece la pena. Podrás llegar siguiendo el foco que apunta al cielo caminando paralelo a la ria y alejándose del mar.
La Suite es una discoteca subterránea que se encuentra en el centro comercial que hay a la entrada del pueblo, junto al complejo hotelero Barceló. Su precio igualmente de 10 euros con consumición. Para nuestro gusto esta discoteca fue mejor, está bien decorada y merece la pena entrar, eso sí, si llueve acudirá aquí todo el mundo y entrar será una odisea. Dicen que es la mejor discoteca de Huelva y que acude gente de toda la provincia los sábados; en nuestra opinión está bien, pero nada fuera de lo normal.
Otra opción es acercarse al Moskito; se trata de un chiringuito playero situado justo donde confluyen la ria y la playa, no tiene pérdida. Acercate el miércoles ya que es el día fuerte y todo el mundo va allí, realmente merece la pena; para nosotros casi lo mejor que hay aquí, con actuaciones en directo y gente de buen rollo asi que acertarás si vas a conocerlo. No esperes encontrar unas instalaciones elegantes, todo es cutre y básico pero tiene algo que gusta; lástima que en nuestros días allí se originase una tormenta que arrancó parte del escenario y la jaima, dejando el panorama más desolador. Su web http://www.mosquitoclub.es/
Cambiando de tema hablar de las playas, para nosotros nada especial; serán frecuentadas por gente mayor con niños, poca afluencia de gente joven con su neverita de buen rollo. Otra cosa que no verás será top less, desconocemos si estará prohibido, pero brilla por su ausencia. Las playas son de arena fina aunque las zonas más próximas al agua se encuentran infectadas de conchas rotas así que deberás tener cuidado al pasar si no te quieres pinchar. Si coges el coche dirección al Portil podrás bañarte en la playa de la Bota, con una extensión kilométrica y escondida entre un bonito paraje de pinos. Deberás dejar el coche junto a la carretera y andar unos 200 metros por senderos entre pinos para llegar al agua; una vez en la arena se presenta como una playa más virgen aunque tampoco se encuentra agua cristalina ni arena limpia, así que en líneas generales diríamos que no impresiona para nada y que no merece la pena mover el coche para llegar hasta aquí, si bien el paraje es bonito.
Para empezar diremos que la duración de la estancia fue de una semana completa, de lunes a lunes. Nos alojamos en un apartamento en el centro del municipio por un precio de 700 euros la semana y con capacidad máxima de 6 personas. El apartamento salió bastante bien de precio si tenemos en cuenta el precio medio de la zona; se encontraba en la calle Caracola a tan sólo 100 metros de la calle Ancha, referencia nocturna del municipio.
Pues bien, para dejar las cosas claras desde el principio diremos que este municipio nos decepcionó bastante, ya que no se ajustó a las expectativas, ni en el sentido de fiesta ni en el de playa; a pesar de ello, intentaremos dar una imagen clara de lo que este lugar ofrece.
Nada más llegar, el tema del coche se presenta como un gran problema, ya que no hay donde aparcarlo, todo el pueblo está tomado por estacionamientos limitados horariamente y la variedad de colores pintados en las calles hará que te vuelvas loco: azul, verde, rojo, naranja y apenas nada de blanco. En los azules hay que pagar todos los días de 9 de la mañana a 12 de la noche y el tiempo máximo es de 2 horas así que olvídate del azul y busca otro color. Los naranjas son para residentes así que no podrás utilizarlos. Los rojos solo se encuentran en zonas determinadas y son los más aconsejables ya que pagas tan solo 6 euros para toda una semana, el problema está en encontrar un sitio apto, ya que todo el mundo te dirá que aparques en la zona del cuartel de la Guardia Civil; nosotros no lo aconsejamos por ser una zona muy amplia y fuera de tránsito, lo cual puede hacer fácil la tarea de los robos, aunque bien es cierto que el municipio parece seguro y escasea la delincuencia, si bien esto es lo que parece sin poder asegurarlo. Las zonas verdes no recuerdo para que eran. Cuidado con equivocar zona roja con naranja!
Tan sólo hay un parking de pago y sale por 17 euros al día así que barato no es, suele haber disponibilidad, pero no te descuides en intentarlo el fin de semana o estará completo.
Una vez solucionado el tema del coche, echamos un vistazo al pueblo en sí, casas bajas y calles estrechas conforman el centro del mismo, la limpieza deja que desear y algunos olores raros acompañan la panorámica.
Aquí todo nos conduce a la calle Ancha y al paseo por la ría, así que hablaremos de ello.
No existe paseo marítimo y en su lugar hay un paseo que discurre a lo largo de la ría que baja de Huelva, pequeñas barcas complementan el paisaje, pasear para contemplarlo puede merecer la pena.
La calle Ancha es aquella donde se encuentra la oferta de ocio, tanto bares, restaurantes, heladerías, etc.. como los pubs y demás locales por donde tendrás que salir si quieres algo de marcha. Se hace extraño ver la mezcla de gente de gente joven tomando sus copas con la gente mayor paseando con niños y abuelos.
Pues bien cabe decir que la calidad de la comida en general está bien, nosotros salimos todos los días a cenar fuera y fue bastante bien; recomendar el Varadero y la Brasería. Cuidado porque Varaderos hay dos en esta calle y para cenar mejor el que está más próximo a la Brasería, una vez probados ambos hay bastante diferencia en calidad y trato. Si vas a la Brasería pide el pez espada al jerez con papas al horno y saldrás satisfecho. El Varadero más para raciones, son grandes, buenas y económicas. Prueba las coquinas, las mejores las comimos en el bar Juanito el Coronel, aunque el resto de raciones no estuvieron mal al final nos pegaron un poco el estacazo. Desaconsejamos el bar Marinero, muy buena pinta por fuera, precio más caro y prometía, pero la realidad fue decepcionante totalmente, más caro y te quedas con hambre, así que pese a que nos lo habían recomendado no nos gustó en absoluto. El bar los Caracoles es muy de batalla, aquí come la gente del pueblo, nos pareció un rancho y la calidad muy justa por no decir mala, además es autoservicio como otros muchos aquí y tendrás que esperar tres colas para comprar tu comida y luego sentarte en tu mesa a comertela.
Una vez llenada la barriga, toca salir a tomar unas cerves así que como todo está en esta calle pues queda cerquita. Lo que encontrarás serán unos 7 u 8 pubs donde la gente se sienta en las mesas de la terraza a pie de calle y se toma tranquilamente su consumición. La sensación es de muy poca fiesta entre semana ya que aparentemente toda la gente que encuentras es del pueblo y hay muy poca gente de fuera que quiera salir a tope. Todo el mundo te dirá que esperes al fin de semana que se pone todo hasta arriba, pero llegado el momento de nuevo decepción, gente afuera, garitos a medio llenar y gente de la zona con pocas ganas de relacionarse con los extranjeros. En nuestra andanza frecuentamos 3 pubs, el Varadero, el Faro y el Desván del abuelo; pues bien, la gente más joven acude al Varadero que al final resultó ser el mejor; la gente un poco más mayor al Abuelo y en el Faro un poco de todo, éste último es el más grande y al parecer el único que funciona en invierno. Los jueves suele haber conciertillos en la mayoría de ellos asi que puede estar bien.
Estos pubs abren hasta las 4 de la madrugada y después deberás irte al Consorcio o a la Suite. El Consorcio es una discoteca al aire libre que solo funciona en verano, el pase cuesta 10 euros con consumición; en general está bien, pero tampoco nada del otro mundo, acercarse una noche merece la pena. Podrás llegar siguiendo el foco que apunta al cielo caminando paralelo a la ria y alejándose del mar.
La Suite es una discoteca subterránea que se encuentra en el centro comercial que hay a la entrada del pueblo, junto al complejo hotelero Barceló. Su precio igualmente de 10 euros con consumición. Para nuestro gusto esta discoteca fue mejor, está bien decorada y merece la pena entrar, eso sí, si llueve acudirá aquí todo el mundo y entrar será una odisea. Dicen que es la mejor discoteca de Huelva y que acude gente de toda la provincia los sábados; en nuestra opinión está bien, pero nada fuera de lo normal.
Otra opción es acercarse al Moskito; se trata de un chiringuito playero situado justo donde confluyen la ria y la playa, no tiene pérdida. Acercate el miércoles ya que es el día fuerte y todo el mundo va allí, realmente merece la pena; para nosotros casi lo mejor que hay aquí, con actuaciones en directo y gente de buen rollo asi que acertarás si vas a conocerlo. No esperes encontrar unas instalaciones elegantes, todo es cutre y básico pero tiene algo que gusta; lástima que en nuestros días allí se originase una tormenta que arrancó parte del escenario y la jaima, dejando el panorama más desolador. Su web http://www.mosquitoclub.es/
Cambiando de tema hablar de las playas, para nosotros nada especial; serán frecuentadas por gente mayor con niños, poca afluencia de gente joven con su neverita de buen rollo. Otra cosa que no verás será top less, desconocemos si estará prohibido, pero brilla por su ausencia. Las playas son de arena fina aunque las zonas más próximas al agua se encuentran infectadas de conchas rotas así que deberás tener cuidado al pasar si no te quieres pinchar. Si coges el coche dirección al Portil podrás bañarte en la playa de la Bota, con una extensión kilométrica y escondida entre un bonito paraje de pinos. Deberás dejar el coche junto a la carretera y andar unos 200 metros por senderos entre pinos para llegar al agua; una vez en la arena se presenta como una playa más virgen aunque tampoco se encuentra agua cristalina ni arena limpia, así que en líneas generales diríamos que no impresiona para nada y que no merece la pena mover el coche para llegar hasta aquí, si bien el paraje es bonito.
Para finalizar diremos que en general no nos gustó demasiado y que decepcionó, ya que dista bastante de otros destinos de playa que hemos visitado en Andalucía y que en nuestra opinión no merece la pena hacer los 650 kilometros que lo separan de Madrid.
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